Glosario
Última actualización: 1/3/2019

- Abreviaturas utilizadas:

amp: ampolla

API: agua para inyectables

Clcr: aclaramiento de creatinina

cm: centímetros

ECG: electrocardioagrama

fr: frasco

g: gramo

GS: glucosalino

h: hora

IM: intramuscular

IV: intravenoso

kg: kilogramo

M: molar

mEq: miliequivalente

mg: miligramo

min: minuto

mL: mililitro

mm: milímetro

mmol: milimol

SC: subcutánea

SF: suero fisiológico (*)

SG5%: suero glucosado 5% (*)

Tª: temperatura

UI: unidades internacionales

(*) Según la terminología técnicamente aceptada, el término “suero fisiológico” se refiere a la “solución salina fisiológica” o “solución de cloruro sódico al 0,9% en agua” y el término “suero glucosado 5%” a la “solución de dextrosa o glucosa al 5% en agua”. En esta guía se ha optado por emplear los términos “suero fisiológico” y “suero glucosado” para denominar a estas soluciones de gran volumen empleadas como vehículos para la infusión de fármacos, por su popularidad y fácil comprensión en el medio hospitalario.

- Compatibilidad. Se habla de incompatibilidad cuando, por distintos fenómenos físico-químicos, la realización de una determinada mezcla intravenosa conlleva la formación de productos inactivos o inadecuados para su administración a los pacientes. Estos fenómenos fisico-químicos pueden ser dependientes de la concentración o bien del equilibrio ácido-base. A veces la incompatibilidad puede ser visual y se manifiesta con cambios perceptibles como precipitación, turbidez o cambios en el color y en la viscosidad, pero no debe olvidarse que también hay incompatibilidades que no se detectan visualmente. La compatibilidad de un medicamento con los fluidos de infusión o con otros medicamentos debe entenderse como un concepto absoluto, de manera que la posibilidad de una incompatibilidad con el fluido intravenoso o con otros medicamentos hace inviable la preparación y administración de dicha mezcla intravenosa.

En la guía se ha especificado la compatibilidad de los medicamentos con los fluidos intravenosos disponibles en el hospital bajo la sección: Fluidos IV compatibles. También se ha incluido una sección sobre compatibilidad con algunos medicamentos que se pueden administrar en “Y” a través del equipo de infusión en la sección: Medicamentos IV compatibles en “Y”. Para otros medicamentos no incluidos en este apartado se recomienda no administrar simultáneamente en “Y” sin consultar fuentes de información específicas sobre el tema o bien al Servicio de Farmacia. Si no se se dispone de información al respecto, entonces NO deben administrarse conjuntamente.

Cabe destacar que la mayoría de estudios sobre compatibilidad se realizan entre dos medicamentos. Por ello, la administración de más de dos medicamentos difícilmente está analizada y por tanto NO es recomendable.

- Estabilidad. la estabilidad de un preparado intravenoso queda definida por el tiempo durante el cual permanece apto para su administración a los pacientes. El tiempo transcurrido desde que se prepara un medicamento estéril en una unidad asistencial hasta que se inicia su administración al paciente debe ser como   máximo de 1 hora. Cabe destacar que en muchas ocasiones el medicamento se administra mediante una perfusión. Por ello, se ha incluido UNA sección de estabilidad que permite conocer la estabilidad fisicoquímica (limitada a un máximo de 24 h) para los medicamentos reconstituidos o diluidos en un fluido IV compatible.   Así, en caso de tiempos largos de administración del medicamento (perfusiones continuas o perfusiones intermitentes prolongadas) se deben comprobar dichos tiempos. Aquellas preparaciones en las que se supere el tiempo de estabilidad establecido deben desecharse e intercambiarse por preparaciones nuevas aunque   queden restos de volumen sobrantes en la preparación.  Es preciso recalcar que esta información NO se debe utilizar para retrasar en más de una hora el comienzo de la administración de los medicamentos que se hayan preparado, como se ha indicado anteriormente.

Por otra parte, en la sección de observaciones se han indicado las condiciones de almacenamiento, especialmente si es necesario conservar el medicamento en frigorífico y si es necesario protegerlo de la luz. A este respecto, en las especialidades que contienen medicamentos fotosensibles se han diferenciado aquellas que sólo deben protegerse de la luz durante el almacenamiento, lo cual supone mantenerlas dentro del envase hasta su uso, de aquellas que requieren precauciones especiales y deben protegerse de la luz durante el almacenamiento y también durante su administración en perfusión, para lo cual se aconseja proteger la bolsa o frasco de la solución con un envoltorio opaco y utilizar equipos de infusión opacos.

- Inyección intramuscular. Inyección de una solución medicamentosa por debajo de la fascia muscular, en la que el líquido administrado se esparce rápidamente entre las fibras musculares elásticas.

- Inyección intravenosa directa. Consiste en la administración directa del medicamento en la vena del paciente o a través del punto de inyección del catéter o equipo de infusión. Se denomina “bolo” o inyección intravenosa rápida, si el tiempo de duración de la administración es de 1 a 2 minutos, mientras que se denomina   inyección intravenosa lenta si es de 3 a 5 minutos.

Como norma general, la velocidad de administración debe ser lenta, ya que la administración demasiado rápida de algunos medicamentos por vía intravenosa puede dar lugar a efectos adversos, incluso graves, pero es una práctica errónea muy frecuente.

En esta guía se ha hecho constar el tiempo recomendado para la administración del medicamento por este método, siempre que se encontrara especificado en las fuentes de información consultadas.

- Inyección subcutánea. Inyección de una solución medicamentosa en el tejido celular subcutáneo o panículo adiposo. Se trata de una vía de fácil manejo y poco agresiva, por lo que en estos últimos años ha ido ganando importancia para resolver las necesidades de determinados pacientes, particularmente en cuidados  paliativos.

- Perfusión intravenosa intermitente. Se utiliza esta técnica cuando los medicamentos se administran a través de un equipo infusor durante un tiempo limitado, generalmente disueltos en una solución intravenosa compatible de pequeño volumen. La duración de la administración suele oscilar entre 15 minutos y varias horas.

- Perfusión intravenosa continua. Administración parecida a la anterior, con la diferencia de que la infusión es continuada (4 horas o más). Se suelen utilizar soluciones para infusión de gran volumen como diluyentes (500-1.000 mL) y bombas de infusión para la administración. Se emplea fundamentalmente para administrar medicamentos que tienen semividas cortas y precisan alcanzar concentraciones plasmáticas constantes o bien cuando es necesario ajustar frecuentemente la dosis en función del efecto observado para alcanzar la respuesta óptima.

En la siguiente tabla se recogen las características aproximadas de tiempo de perfusión, volumen y velocidad que determinan las distintas formas de administración intravenosa:

 

Formas

Tiempo (min)

Volumen (mL)

Velocidad (mL/min)

IV directa

3 - 10

£ 10

0,5 - 1,0

Perfusión IV:

Intermitente

15 - 120

50 - 250

2,0 - 3,5

Continua

≥ 240

≥ 500

1,7- 2,5