- Asegúrese de que se realiza una limpieza y desinfección diarias de las superficies de trabajo.
- Realice la preparación en condiciones de limpieza y asepsia.
- Evite las corrientes de aire y asegúrese de disponer de iluminación suficiente para poder leer claramente las marcas de las jeringas y los etiquetados de los medicamentos.
- Realice un procedimiento adecuado de higiene de manos antes de la preparación y administración de cualquier medicamento inyectable y utilice guantes desechables sin polvo.
- Es necesario que desinfecte las ampollas y la superficie elastomérica de los viales con una gasa impregnada en alcohol 70º. La limpieza debe hacerse en una sola dirección para asegurar la eliminación de partículas. Debe esperarse al menos 30 segundos hasta que el alcohol se haya evaporado.
- Nunca debe tocar durante la preparación las zonas de alto riesgo de contaminación, que son el extremo final de las agujas, el cono de las jeringas, los cuellos de las ampollas y la zona elastomérica del vial tras su desinfección.
- Como norma general, un medicamento inyectable sólo se utilizará una única vez, ya que la mayoría de las presentaciones de medicamentos inyectables son envases monodosis sin conservantes que están destinados a un sólo uso y se deben utilizar para un único paciente en una única ocasión. El sobrante se desechará tras la elaboración y administración al paciente del preparado estéril.
- Nunca utilice una bolsa o frasco de suero para preparar jeringas, para lavar o salinizar vías o para reconstituir o diluir medicamentos para más de un paciente.
- Sólo las preparaciones comerciales en que el etiquetado especifique que el producto tiene conservantes y que puede utilizarse más de una vez se califican como multidosis (ej: insulinas u otras hormonas inyectables en vial o en pluma). Estos envases multidosis aseguran una estabilidad microbiológica de mayor duración y se podrán utilizar varias veces, pero sólo para uso unipersonal, esto es, para el mismo paciente.
- No se puede dejar una aguja insertada en un vial multidosis, con el fin de conectar diferentes jeringas para usar en múltiples pacientes o para obtener múltiples dosis en un mismo paciente, por el alto riesgo de contaminación.
- Cuando se utilicen viales multidosis siempre se debe indicar la fecha de primera apertura, la fecha límite de utilización y el paciente en que se utilice.
- Los preparados multidosis acondicionados en plumas (insulina, interferones, etc.) deben identificarse con los datos del paciente. Al alta hospitalaria del paciente se le entregará la pluma, y si no procede la continuación del tratamiento, ésta se desechará.
- Seleccione la medicación correspondiente y coteje la etiqueta del medicamento con la orden de tratamiento del paciente.
- Lea atentamente el etiquetado y revise el nombre, dosis, presentación, vía y caducidad, así como la integridad del envase del medicamento.
- Ponga especial atención cuando maneje envases de medicamentos de apariencia similar o con nombres similares.
- Prepare la medicación siguiendo la guía de administración del hospital o el protocolo de la unidad, y/o la ficha técnica o el prospecto del medicamento.
- Calcule el volumen de la ampolla, vial o frasco necesario para administrar la dosis prescrita al paciente.
- En caso de que sea necesario realizar un cálculo complejo y en medicamentos de alto riesgo, otra enfermera debe verificarla exactitud del cálculo.
- Cuando se precise medir el volumen de la solución inyectable a dosificar, utilice la jeringa con el volumen más próximo al volumen necesario, para así asegurar una mayor precisión en la medida.
- Elabore las etiquetas de la medicación que se vaya a administrar diluida en sueros o en jeringas (Anexo 4).
- Cualquier envase debe etiquetarse inmediatamente después de su preparación por aquella persona que lo haya preparado.
a) Preparación de la medicación acondicionada en ampollas(cristal o plástico)
- Golpee con cuidado el cuello de la ampolla para desalojar cualquier fracción de dosis que se encuentre allí alojada.
- Si la ampolla contiene una suspensión en lugar de una solución, agítela con cuidado para mezclar el contenido inmediatamente antes de cargar la jeringa.
- Abra las ampollas de cristal por el cuello, usando una gasa si fuera necesario.
- Introduzca la aguja, conectada a la jeringa, con el bisel hacia arriba, sin tocar los bordes del cuello ni el fondo, y extraiga el volumen de solución requerido. Incline la ampolla si fuera necesario (el cuello de algunas ampollas de plástico está diseñado para conectar directamente con la jeringa sin tener que emplear aguja).
- Una vez cargada, Invierta la jeringa y retire las burbujas de aire que quedan entre el émbolo y la aguja. Expulse el aire con cuidado.
- Si la medicación se va a administrar directamente con la jeringa: retire la aguja de la jeringa y encaje una nueva aguja estéril. Etiquete la jeringa (Anexo 4).
b) Preparación de la medicación acondicionada en viales o frascos
- Retire la cápsula externa que sella el vial y limpie el tapón de goma con alcohol de 70º. Posteriormente deje secar durante al menos 30 segundos.
- Si el vial contiene una suspensión en lugar de una solución, agítelo con cuidado para mezclar el contenido inmediatamente antes de cargar en la jeringa.
- Cargue la jeringa con un volumen de aire equivalente al volumen que se requiera de solución.
- Inserte la aguja en el vial a través del tapón de goma. Invierta el vial. Mantenga la aguja en la solución y empuje el émbolo despacio para añadir el aire al vial. Libere el émbolo y deje fluir la solución en la jeringa.
- Si el volumen de la solución requerido es grande utilice una técnica de “tirón y de empuje”. Inyecte pequeños volúmenes de aire y recoja un volumen igual de solución hasta que se obtenga el total requerido. Este método ayuda a reducir al mínimo el desarrollo de presión en el frasco o vial.
- Cargue la jeringa con el volumen requerido de solución. Retire la aguja del frasco. Invierta la jeringa y retire las burbujas de aire que quedan entre el émbolo y la aguja.
- Si la medicación se va a administrar directamente con la jeringa: retire la aguja de la jeringa y encaje una nueva aguja estéril. Etiquete la jeringa (Anexo 4).
c) Reconstitución de un polvo liofilizado
- Retire la cápsula externa que sella el vial y limpie el tapón de goma con alcohol de 70º. Posteriormente deje secar durante al menos 30 segundos.
- Cargue el volumen requerido de disolvente.
- Inyecte el disolvente en el vial. Mantenga la punta de la aguja encima del nivel de la solución en el vial y libere el émbolo. La jeringa se llenará con el aire que ha sido desplazado por la solución. Si el volumen de la solución requerido es grande, utilice una técnica de “tirón y de empuje”, tal y como se indica en el apartado anterior.
- Con la jeringa y la aguja pinchada, agite el frasco con cuidado para disolver todo el polvo, a no ser que la información del producto indique lo contrario. Este proceso puede llevar varios minutos. Cargue la jeringa con el volumen requerido de solución. Compruebe que no produce espuma.
- Retire la aguja del vial. Invierta la jeringa y retire las burbujas de aire que quedan entre el émbolo y la aguja.
- Si la medicación se va a administrar directamente con la jeringa: retire la aguja de la jeringa y encaje una nueva aguja estéril.
- Etiquete la jeringa (Anexo 4).
- Si existe un dispositivo de reconstitución específico proporcionado por el fabricante, lea detenidamente las instrucciones y sígalas.
d) Preparación de un medicamento para perfusión
- Cargue la medicación en una jeringa siguiendo los procedimientos descritos en el apartado anterior correspondiente.
- Seleccione el suero para la infusión y compruebe que la envoltura externa esté intacta y sin grietas, y que el contenido es transparente y no presenta partículas en suspensión o una coloración extraña.
- Si el volumen de solución del medicamento a añadir es superior al 10% del contenido inicial del suero (más de 50 mL a añadir a 500 mL ó 100 mL a 1 litro de infusión), debe retirar primero un volumen equivalente.
- Efectúe la dilución apropiada siguiendo el protocolo de la unidad o, si no dispone de éste, consulte la información contenida en las fichas informativas de esta guía y/o la ficha técnica o el prospecto del medicamento.
- En el caso de pacientes con restricción hídrica, en los que se precise diluir el medicamento en el mínimo volumen posible, revise siempre su estabilidad en la dilución deseada o bien consulte al Servicio de Farmacia.
- Inyecte la medicación en el suero de infusión por el centro del lugar de inyección, teniendo cuidado de mantener la punta de la aguja lejos de la pared de la bolsa.
- En el caso de que se necesiten cargar varias ampollas o viales para añadir al suero de infusión, se cargarán todas ellas en la misma jeringa para evitar múltiples pinchazos en el suero y así el consiguiente riesgo microbiológico.
- Retire la aguja e invierta con cuidado la mezcla varias veces para asegurar la correcta dilución antes de comenzar la infusión.
- Compruebe que el aspecto de la solución final no sea turbio, contenga partículas o tenga una coloración extraña.
- Etiquete el envase de la mezcla de infusión siguiendo las instrucciones recogidas en el Anexo 4.
- Las mezclas de dos medicamentos en un mismo suero o contenedor final solo podrán realizarse tras comprobación de la compatibilidad. Ante la duda, se debe consultar con el Servicio de Farmacia.
La estabilidad de un preparado intravenoso queda definida por el tiempo durante el cual permanece apto para su administración a los pacientes.
- Tiempo de inicio de la administración desde la preparación. El tiempo transcurrido desde que se prepara un medicamento estéril hasta que se inicia su administración es un factor crítico de cara a la contaminación microbiológica, especialmente cuando se prepara en una unidad asistencial. Por ello, la normativa actual indica que los medicamentos inyectables que se preparan fuera de ambiente estéril (cabinas de flujo laminar) deben comenzarse a administrar al paciente como máximo en 1 hora desde su preparación y en todo ese tiempo se debe asegurar su correcta conservación.
- Duración máxima de la administración de los medicamentos. En ocasiones el medicamento inyectable preparado se administra mediante una perfusión de larga duración. Por ello, en el apartado de estabilidad de las fichas de medicamentos de esta guía se ha incluido una sección que permite conocer el tiempo de estabilidad fisicoquímica (limitada a un máximo de 24 horas) para los medicamentos reconstituidos o diluidos en un fluido IV compatible.
Esta información se debe utilizar para conocer la duración máxima de la administración de los medicamentos. Así, en caso de tiempos largos de administración del medicamento (perfusiones continuas o perfusiones intermitentes prolongadas) se deben comprobar dichos tiempos. Aquellas preparaciones en las que se supere el tiempo de estabilidad establecido deben desecharse e intercambiarse por preparaciones nuevas aunque queden restos de volumen sobrantes en la preparación (p. ej. las perfusiones continuas de pantoprazol deben preparase e intercambiarse cada 12 horas, que es el periodo máximo de estabilidad de la dilución).
Es preciso recalcar que esta información NO se debe utilizar para retrasar en más de 1 hora el comienzo de la administración de los medicamentos que se hayan preparado, como se ha indicado anteriormente.
Referencias:
- National Patient Safety Agency. Promoting safer use of injectable medicines. Patient Safety Alert 20. 28 Mar 2007.
- Institute for Safe Medication Practices. 2011 ISMP Medication Safety Self-AssessmentÒ for hospitals. Horsham, PA: Institute for Safe Medication Practices; 2011.
- Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad. Guía de buenas prácticas de preparación de medicamentos en Servicios de Farmacia Hospitalaria; 2014.
- Institute for Safe Medication Practices. ISMP safe practice guidelines for adult IV push medications. Horsham, PA: Institute for Safe Medication Practices; 2015.
- Council of Europe. Resolution CM/Res (2016)2 on good reconstitution practices in health care establishments for medicinal products for parenteral use.
- Cuestionario de autoevaluación de la seguridad del sistema de utilización de los medicamentos en los hospitales. Versión española II. Madrid: Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad; 2018.